Downtempo señores. No esperéis un disco de bailoteo y rabia. Aquí fluyen las atmósferas, cada compás rítmico es una caja que se estrella contra el suelo y se disgrega en cientos de trocitos. Puro dub y glitch que te parió, Brendan Angelides es un maestro. No sabrás por donde coger cada tema, pero tienen un algo que te atrapa. Como un ninja, eficaz y siniestro, mejor en la oscuridad
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